lunes, 2 de agosto de 2010

LAS DOCENTES

Las docentes, si y digo “las” porque el 99.5% de los profesores que tengo en mis escuelas asignadas son personal femenino con una sola excepción, un profesor del que otro día hablaré, cada una me ha recordado a mis profesoras de infancia y es ahora cuando entiendo la importancia de educarse, siendo muchas veces necesario hacerlo con reprensiones, pareciera la única manera de aprender, siendo una de mis impresiones mas relevantes hasta ahora, porque como dice mi abuela: ¡Los muchachos son necios! Y tiene toda la razón.



El fenómeno extraño lo he encontrado y las profesoras me lo han ratificado, que tras las clases de tecnología en aquellas escuelas donde ya he instalado los equipos, y es que cuando el niño esta en frente del computador, en ese momento deja de existir la distracción, deja de existir su maldad inocente, es algo nuevo, algo cambiante capaz de llevarlos a conocer lo impensado a través de una pantalla, pero recalco que deben ser bien guiados, guiados por esa persona a la que muchas veces les dijimos mami, confundidos y entre risas picaras, corregíamos: ¡Profe!.




Me he encontrado con la profe regañona (Aunque así son casi todas), a la tranquila, a la bonita, a la que huele bien, a la de avanzada edad, a la jovencita, a la temperamental, a la de grandes proporciones, a la que parece la mamá de todos, a la que aplica métodos de enseñanza distintos; bueno hay de todo en las montañas, algo que me causa alivio es que no he encontrado tiranas como una que tuve en el Kinder del Colegio Andino.

Algo que les produce tranquilidad es que en sus escuelas retiradas tienen el papel de todas las autoridades educacionales, mejor dicho, son: docentes, rectoras, coordinadoras, Sico-orientadoras, conserjes, administradoras, cultivadoras, y algunas hasta Chefs (Así se escribe el plural de Chef??), se preguntarán, ¿Qué tranquilidad puede haber asumiendo tantos roles dentro de un trabajo que inicialmente era solo ser docente?


La respuesta consiste en que en SUS escuelas, no tienen al jefe (Rector) al lado mirando lo que hacen o dejan de... (Aún así ellas deben hacer llegar las evidencias periódicamente de las actividades realizadas en la escuela), no hay envidias ni momentos malucos en el ámbito laboral con los compañeros/as de trabajo, la docente es quien maneja las situaciones y de ser necesario se trascienden hasta el municipio, en lo anterior radica la tranquilidad de la docencia rural.

Se me hace tan raro ver a las profesoras pasar de estados casi histéricos con los niños a calma total cuando cambian de entorno, no se asusten, así aprendemos, aprendimos y quien sabe hasta cuando será así, todo porque los muchachos son necios.



1 comentario:

  1. Te recomiendo que leas: "Del extraño al cómplice" de Melich.
    Es un libro muy bonito que trata la interacción entre profe y aprendiz. De verdad es muy bonito.
    Un abrazo. P.J

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